A LOS AUSENTES DE CEUTA
(Dedicado a todos los que un día nos fuimos para siempre volver)
Ausentes –que dijera D. Juan-.
Ausentes que vienen,
ausentes que van.
Ausentes los de lejos, los de muy lejos
y los de cerca y los de no tan cerca…
Los que nunca se fueron del todo.
Los que solo extendieron sus ramas
dejando raíces en casa.
Los que siempre dicen muy claro
que son nacidos en Ceuta.
Los que solo tiraron del cuerpo,
dejando su alma caballa
correteando por San Amaro
o bañándose en la playa.
Ausentes…
los que siempre miran al Sur
buscando las tardes doradas,
buscando ese verde caballa;
el verde de la bahía
donde te mirabas tú.
Ausentes…
que cuando vamos a Ceuta
nunca decimos que vamos,
decimos que regresamos,
¡tanto dolió el marcharnos!
Ausentes…
que viven lejos
pero siempre están pendientes
del tiempo que hará en el Estrecho.
Ausentes…
Los que una madrugada,
dando vueltas en la cama,
se despiertan y comienzan
a acordarse de su Ceuta,
de la infancia, de la huerta,
de la puerta de su abuela,
de los juegos de los niños,
de las niñas del Caballa,
del Cervantes, del Casino,
de aquellos primeros vinos
y cigarros a escondidas,
de su novia tan querida;
de un paseo con palmeras
y las luces de neón
de un anuncio con estrellas
que decía: CasaRos;
de un cielo con palmeras,
de burgaillos por el suelo,
de sueños gastando suelas
Calle Real arriba,
media vuelta y hasta el CAS…
Porque solo las ramas se extienden,
las raíces no se van.
Por eso, “Ausentes de Ceuta”,
-como os llamara D. Juan-
podréis estar muy lejos
pero siempre estaréis cerca.
Carlos Bernal
Abril de 2012.
¡TAN LEJOS, TAN CERCA! Lo tenía claro, larvado por ahí, desde hace mucho tiempo. Un abrazo sentido, compadre.
By: Milano on 17 abril 2012
at 22:12
«Tenías» x «tenía»
By: Milano on 17 abril 2012
at 22:14
Jejeje, ¡cómo me conoces, puñetero!
Sí, andaba larvando y yo andaba rumiando. Un empujoncito me dio anoche Juan Manuel Sentís, que me pidió escribiera algo para el grupo de ausentes.
Un abrazo, compadre, ha sido el primer comentario. Gracias por darme alas, siempre.
By: caberna on 17 abril 2012
at 22:23
¡¡No preocuparos amigos Ausentes!! mientras este Yo Mismo aqui y tenga suficiente fuerza como para poneros unos comentarios o, unas fotos de los rincones de vuestro trocito de tierra, no os sentireis tan Ausentes.
Un abrazo
By: yo mismo on 17 abril 2012
at 23:43
Cierto, amigo Joaquín. Muchos de nosotros sabemos qué teléfono hay que marcar cuando se llega a Ceuta, para decir: Hola, ya estoy aquí, ¿cuándo nos vemos?
By: caberna on 18 abril 2012
at 11:09
!Que bonito Carlos!
By: ninaruiz on 17 abril 2012
at 23:44
Gracias, Nina. Un beso
By: caberna on 18 abril 2012
at 11:09
Desde las mismas entrañas y arañando gozoso el pasado, los sentimientos, las raíces, los recuerdos de cada segundo vivido y presentes las ausencias que no logran arrancar nuestras raíces. Enhorabuena, amigo Carlos, pero que bien lo haces, puñetero. Abrazos
By: Antonio on 18 abril 2012
at 02:20
Gracias, Antonio. Es verdad que cuando se deja al corazón hablar fluyen las palabras desde lo más hondo del ser y entonces todo es más fácil. Un fuerte abrazo.
By: caberna on 18 abril 2012
at 11:11
Inexplicablemente sin nacer en Ceuta me siento caballa. Mi padre emigro a los EE.UU. en los años 40ta. Por cuestiones de la vida propia de la epoca tardo años en volver a ver Ceuta. En mi adolecencia me mando a Ceuta a conocer a su familia que despues de un beso y abrazo los adoraba. Ver con mis ojos la Ceuta que mi padre me habia hablado tan entrañablemente me fue dulce y doloroso. Doloroso porque comprendi lo que habia sufrido el estar lejos de su familia y Ceuta. Quiero mucho a los EE.UU. pero sin lugar a dudas me siento como caballa que por cosas de la vida nacio fuera de ella. Saludos y abrazos
By: Tony on 18 abril 2012
at 04:32
Veo por tus palabras, Tony, y por los comentarios de tu prima Nina, que eres un caballa más entre nosotros, y creo sinceramente que el Ayuntamiento de nuestra ciudad debería hacerte hijo adoptivo por la historia pasada, porque tu padre se lo merecía, porque tú te lo mereces…
Un abrazo, caballa, y vuelve por estas páginas siempre que sientas nostalgia (de eso aquí hay a borbotones).
By: caberna on 18 abril 2012
at 11:15
Primo tu eres tan caballa de corazón como si hubieses nacido en Ceuta, En Nueva York, tienes la embajada caballa, Ya ves que cosas tan bonitas escribe nuestro amigo O’donnero Carlos Bernal.Besos desde su blog Toñito.
Nina.
By: ninaruiz on 18 abril 2012
at 07:04
Como nos tienes acostumbrados, siempre nos sorprendes con tu clara y fluida exposición, en este caso sobre la añoranza de lo vivido en otros tiempos,. de lo que pudo ser y no fue y de lo que aún anhelamos en el futuro, o de lo que quede de él.
By: Santiago on 18 abril 2012
at 19:57
El punto se ha caído de la coma, no lo entiendo.
By: Santiago on 18 abril 2012
at 20:20
Gracias, vecino, eres un monstruo. ¡Lo que me he reído con esa caída del punto de la coma!
By: caberna on 18 abril 2012
at 23:52
Precioso, el poema y la alusión. Realmente, a los ausentes o no nos pone el vello de punta.
By: Jose Luis on 19 abril 2012
at 10:52
Gracias, Jose Luis, me alegro que te haya gustado. Un abrazo
By: caberna on 19 abril 2012
at 23:46
Maravilloso, dos lagrimones de emoción me han caído, no se puede decir mejor. Gracias por hacernos estar «tan cerca».
By: Carmen on 14 junio 2012
at 02:49
By: caberna on 14 junio 2012
at 19:26
…!que me has emocionado!, que mas bonito no se puede decir. Un beso
By: kaoskaos on 14 junio 2012
at 03:09
Bravo, Carlos. Entrañable evocación. Un abrazo.
By: Enrique (Aquiles) on 14 junio 2012
at 08:33
Gracias por vuestras palabras de cariño que me animan a seguir escribiendo. Un fuerte abrazo.
By: caberna on 14 junio 2012
at 19:29