José Manuel abrió la puerta del compartimento y se encontró a Pat sentada en la cama. Estaba triste.
-No debía haber venido contigo, no tengo que fiarme de los hombres. Todos terminan engañándome.
-Un día, conocerás a alguien y todo será distinto –replicó él-.
-Vístete y no pienses tanto. Vamos a cenar. Te espero fuera.
Al rato, Pat salió y de su larga melena negra se escapaba un fuerte olor a perfume que disimulaba la fuerza del sudor de la anterior batalla, donde, cosa extraña, había dos vencedores.
Mientras el tren enfilaba hacia Despeñaperros, ellos cenaban sentados en una pequeña mesita, uno frente al otro, alumbrados por una pequeña lámpara tenue que hacía el ambiente muy grato para comer, beber y seguir mirándose a los ojos como dos tiernos enamorados.
Tomaron un Whisky al final y las lenguas se soltaron con historias con malos finales. Eran los trozos de vida de los dos, a veces muy parecidos.
Las luces del restaurante se fueron apagando y era la señal para salir.
-Vamos, que nos echan, -dijo José Manuel pagando la cuenta-.
Cogidos de la mano llegaron a su vagón. Él la dejó pasar y aprovechó para mirarla de nuevo. Volvieron a hacer el amor durante un buen rato hasta caer rendidos. Pat conocía más posturas de las que José Manuel estaba acostumbrado. Al final cayeron rendidos y abrazados durmieron hasta que el expreso llegó a Córdoba.
Un gran grito de ¡¡Córdoba, veinte minutos!! los despertó sobresaltados y empezaron de nuevo a besarse.
Sobre las nueve de la mañana, José Manuel se levantó despacio para vestirse. Pat seguía durmiendo plácidamente.
-Pat, despierta, vamos a desayunar.
Tomando café y tostadas entraron por fin en Madrid…
José Antonio.
NOTA
A PARTIR DEL LÚNES,ESTAS
HISTORIAS SE VERÁN INTERRUMPIDAS
POR UNAS VACACIONES DEL AUTOR.
hasta la vuelta…
By: José Antonio on 13 septiembre 2008
at 11:06
¿Y ahora que hacemos?
Que tengas unas merecidas y provechosas vacaciones, cuidado con deambular por los andenes.
Yo, mientras llegan las próximas entregas me entrendré con EL JUEGO DEL ANGEL, que es un tocho de cuasi 700 páginas, aunque ya he dado buena cuenta de ellas, cuando las termine haré una breve sinopsis de la obra.
By: santiago on 13 septiembre 2008
at 11:47
Hijo mío, tanta conscupiscencia no es buena para tu alma. Recuerda que eres templo del Espíritu Santo… el Señor te perdonará con solo desearlo, inténtalo. Y reza por esa debil mujer que, como Eva, no supo resistir la tentación del maligno…
By: Alter Ego on 13 septiembre 2008
at 18:40
Amén, que quiere decir así sea.
Y a otra cosa, mariposa.
Vamos a cambiar un poco de registro, ¿vale?
By: caberna on 13 septiembre 2008
at 19:49
Me gusta tu historia, muchas veces he cogido yo ese mismo tren hacia Madrid.
http://africapuente.wordpress.com/
By: Africa Puente Cristo on 13 septiembre 2008
at 21:42
Ya estoy aquí.Lo bueno pasa pronto,
pero claro,el consuelo del pobre, lo
bueno y breve dos veces bueno.
(y una mier.. ) Aparte,la vuelta en
avión con tormenta incorporada y
los huevecillos de corbata.Creí que
iba a servir de comida para los peces del
Mediterráneo.En fin,ya pasó.
ALTER EGO: Los personajes de mis historias son
concuspicentes no yo.Deja al Espiritú Santo tran-
quilo que tiene mucho trabajo.
AFRICA PUENTE CRISTO:Saludos y gracias por
leerme.
CABERNA: No pude ir a Ceuta.Charo,si.He tenido
que venirme antes por motivos de trabajo aunque
elegí el avión equivocado.Nunca se me olvidará
el vuelo IB-8278.Sus muelas.
Ya he visto por encima tus posts recientes. Esta
tarde y mañana todavía estoy liado.Tengo que
seguir con PAT y JOSÉ MANUEL que los dejé en
Madrid y no sé que será de ellos.
By: José Antonio on 22 septiembre 2008
at 13:37
Bienvenido, Jose Antonio. Siento el viaje movidito de vuelta a Melilla.
De acuerdo, esperamos las entregas nuevas y las iremos incluyendo.
Un abrazo y me alegro de que todo se quedara en un susto.
By: caberna on 22 septiembre 2008
at 19:59